La historia de un pionero que trajo la calidad de color repetible a los convertidores de envases de tamaño medio y anunció un nuevo diseño modular adaptable en la dispensación de tintas.

Este mes celebramos los 20 años del Colorsat Slim, el dispensador que hizo accesible la calidad de color repetible y la eficiencia de procesos para impresores de papel y empaques flexibles de tamaño medio. Lanzado en drupa 2004, el dispensador ha sido un pionero, proporcionando un rápido retorno de inversión gracias a su fácil montaje y características de diseño económico.

A principios de la década de 2000, la calidad del flexo estaba mejorando gracias a los avances en placas e imágenes. Pero para que los impresores de flexografía pudieran competir con la reducción de desperdicios del offset, era crucial reducir el desperdicio, especialmente durante la fase de preparación, ya que las tiradas de impresión eran cada vez más cortas.

Color bajo demanda: la clave para la reducción de desperdicios

Con la coincidencia de color siendo quizás la etapa más compleja en la preparación, los convertidores se dieron cuenta de que la tinta era un buen lugar para comenzar a buscar reducciones de costos, lo que impulsó el interés en los dispensadores.

Maarten Hummelen, director de marketing de GSE, explica: “La dispensación de tinta – preparación de colores bajo demanda con precisión en cantidades exactas para el trabajo – ofrecía el potencial tanto para ahorros de costos como para mejoras en el tiempo de producción. Así que, naturalmente, recibimos más consultas de impresores de empaques buscando eficiencias internas. Pero para instalaciones de conversión que consumían menos de 100 toneladas de tinta al año, los dispensadores existentes eran demasiado grandes y costosos”.

Dispensación escalable y extensible para necesidades cambiantes

“Esto nos llevó a desarrollar un nuevo tipo de dispensador, fácilmente montable por el cliente, con componentes económicos y modulares. El Colorsat Slim llegó con gran éxito: su diseño más sencillo suponía una menor inversión y, por tanto, una amortización más rápida. Y como el Slim ayuda a reducir el consumo de tinta hasta en un 30%, los clientes no tardaron en notar su beneficioso impacto en la cuenta de resultados”.

Con su construcción modular, el Colorsat Slim representaba una nueva generación de diseño que era extensible y escalable: puedes intercambiar partes o agregar más tintas base fácilmente, por ejemplo. Hoy en día, esta flexibilidad se ha convertido en un estándar en los sistemas de dispensación de GSE, y un activo importante en una era en la que las necesidades de manejo de tintas son más propensas a cambiar.

Hasta la fecha, hay cientos de dispensadores Slim instalados en todo el mundo, y muchos de ellos siguen aportando valor después de 20 años de funcionamiento. A finales de este año, nos pondremos al día con el primer cliente (¡que sigue utilizando la máquina a diario!) – y uno de los clientes más recientes – sobre sus experiencias. Permanezca atento.